Dos delincuentes amenazaron con armas de fuego al ocupante de una vivienda, coparon su domicilio y luego secuestraron a la víctima, quien fue obligado a manejar su propio automóvil. Finalmente dejaron ir al joven, pero quemaron su vehículo.
La situación delictiva se produjo cerca de las 21:30 horas del miércoles. En ese momento el joven Rodrigo, quien reside en 25 de Mayo casi Ellauri, estaba por ingresar con su automóvil Peugeot 205 al garaje de su domicilio.
En ese momento es abordado por dos individuos que lo amenazan con armas y lo ingresan a la fuerza al garaje, para luego entrar al domicilio. Bajo amenazas se llevan varios artículos telefónicos y otros aparatos electrónicos que la víctima tenía para reparar. Incluso los delincuentes se llevaron un bajo, propiedad del joven.
“No tengo nada más”, al parecer le dijo Rodrigo a los copadores, y un vecino escuchó esa respuesta por lo que dio aviso al Servicio de Emergencia 911. Antes que los agentes del orden llegaran a la vivienda, los delincuentes se dieron a la fuga. Uno lo hizo en una motocicleta que habían dejado en la esquina, mientras que el otro obligó al joven con amenazas a sacar el auto y salir del lugar a toda velocidad hacia la villa San Isidro. Al llegar a esa zona de Las Piedras, el copador le ordenó que se bajara y se fuera corriendo de la zona, cosa que hizo. Posteriormente el delincuente prendió fuego el automóvil. El patrullero encontró a Rodrigo cuando venía caminando por Elías Regules hacia su vivienda
VECINOS SALIERON A BUSCARLO
Uno de los vecinos consultados por Actualidad, sostuvo que al ver el movimiento policial y enterarse de la situación “lo salimos a buscar por todos lados. Hablé con el vecino del almacén y ambos salimos en el auto para buscarlo. Por suerte no pasó nada, pero que le haya sucedido esto es increíble. Rodrigo es un chiquilín recontra sano. Muy buen vecino, no se mete en nada. Después, cuando hable con él se quebró por la bronca y la impotencia que le generó la situación. Es increíble que esto suceda en el centro de Las Piedras, parece que nos están cuidando en cada movimiento que hacemos”, concluyó el vecino
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