Fueron sepultados el pasado viernes los restos mortales del diputado por Canelones del Partido Nacional, Alberto Perdomo, quien falleció a causa de una virulenta infección en el oído, que derivó en un infarto. De origen Wilsonista, desde 1999, fue electo para integrar la Cámara de Representantes por el Partido Nacional, y desde ese momento fue renovando su banca en cada elección nacional.

Fue un estratega, un líder que se destacaba por su forma de trabajo similar a los viejos caudillos políticos: su contacto con la gente, el diálogo franco y sincero y su preocupación de encontrar soluciones a quienes se le acercaban con un problema.

Su trabajo permanente, sus visitas a las diversas localidades del departamento, y su trato con la gente, lo convirtieron en el diputado con más votos en el departamento de Canelones y, por esa condición, ocupó años atrás la presidencia de la Cámara de Diputados.

En las elecciones departamentales, nuevamente alcanzó un importante número de los votos de su partido. En este período, era miembro de la Comisión de Industria, Energía y Minería y delegado en otras. Alberto Perdomo fue velado en su ciudad natal, Santa Lucía, adonde se trasladaron senadores y diputados de diversos partidos políticos y vecinos de todo el departamento.

En el sepelio en el Cementerio de Santa Lucía, se vivieron emotivos momentos cuando hicieron uso de la palabra el intendente de Florida, Carlos Enciso y el intendente de Canelones, Yamandú Orsi.

CARLOS ENCISO

“Un hombre que poseía gran versatilidad y capacidad de análisis”, destacó Enciso.

Carlos Enciso, amigo personal del diputado Alberto Perdomo, fue el primero en hacer uso de la palabra. “En nombre del Directorio del Partido Nacional, en el cual me acuerdo estando con Alberto (Perdomo) en aquellos años de inicios juveniles de la década del 80, con muchos que están hoy aquí y muchos que ya no están, con ese líder que fue para nosotros Wilson. También con nuestros sueños más particulares, desde la formación del movimiento estudiantil y lo que fue también la organización de diferentes corrientes internas que tuvimos el gusto de compartir con Alberto. No siempre estuvimos juntos, porque cada camino y cada departamento viven realidades diferentes, pero jamás dejamos de tener esa amistad y ese diálogo permanente. El consejo de un lado y del otro, junto a la consulta”.

“En esa época generamos una esperanza, que en algo Alberto logró concretar en Canelones, junto a sus agrupaciones y sus convicciones. Con esa virtud y esa capacidad poco vista, de ser un hombre de acción, pero también de pensamiento y de lectura, con una gran capacidad de armado electoral y siempre estando cerca del compañero, preocupándose permanentemente por el dirigente y por el amigo. Ese hombre de tender puentes con la oposición de turno o con el gobierno de turno, estando en el lugar donde estuviera junto a su agrupación”, puntualizó.

Enciso resaltó que “era un hombre que a primera vista podría parecer frío o distante, pero enseguida de conocerlo aparecía esa sonrisa sincera que el pasado martes la vimos por última vez. Un hombre que poseía una gran versatilidad y capacidad de analizar la realidad nacional, departamental e internacional. Un hombre que cuando no estaba en el Legislativo, no dejaba de hacer política, visitaba a sus dirigentes, a los vecinos, y pensaba en los demás las 24 horas del día”.

Más adelante, se refirió a Valeria (su esposa) como testigo del gran momento que vivía Alberto Perdomo, “era un momento donde él tenía grandes proyectos y estaba muy feliz. Manteniendo esa capacidad pendular de hablar con todo el mundo, pero con esa virtud en la política como en la vida, de brindarse con todos. Pero él sabía muy bien donde estaban sus convicciones y sus ideales”, señaló el intendente de Florida.

Remarcó que “su recuerdo siempre estará con nosotros, no desaparece hoy, sino que permanecerá día tras día. Todos sabremos como recordarlo. Él decía que tenía pocos amigos en política, y decía que yo era su amigo personal”.

“En nombre del Partido Nacional y con el permiso de todos los compañeros que están aquí, despido a un hermano que ya no lo tengo y es Alberto”, concluyó Carlos Enciso.

YAMANDÚ ORSI

“Si hoy Canelones tiene cosas positivas, muchas se las debe a Perdomo”, reconoció el Intendente de Canelones, Prof. Yamandú Orsi.

Se acercó al féretro y pidió “permiso para hablar en nombre del Departamento que tanto quisiste y por el que tanto aportaste. Porque si hoy Canelones tiene cosas positivas, muchas se deben a la puntería de este increíble actor político. Pido permiso también para hablar en nombre de una barra de actores políticos departamentales, de todos los partidos, que empezamos a transitar una nueva generación. Y si esto funciona así, es porque vos (Perdomo) fuiste uno de los artífices de que todos tenemos que dialogar y comer un asado todos juntos”.

“Me tocó más de una vez con gente de dos o tres partidos estar con Alberto, reuniones que armaba él, por esa convicción que Alberto tenía.

Mucho hay que agradecerte, en primer lugar, los libros que nos regalabas, donde por poco más nos obligabas a leerlos. Agradezco esa virtud de que la política y la amistad, aún desde visiones distintas, también es posible. A través de la actividad política conocimos amigos como él, que a la vez nos permitió vincularnos con otros y que antes pensábamos que ni podíamos conversar. Él lograba estas cosas”, dijo el intendente.

“Aquellos que estamos en esta actividad, agradecemos el impulso y la fortaleza que nos da el entender que la política es una muy linda actividad, siempre y cuando se la tome con el respeto, el cariño y con la altura con las que vos nos enseñaste que había que tener.

Muchas gracias Alberto, aprendimos mucho y estoy seguro que podremos utilizar todas esas herramientas para hacer de nuestro país, no solo de Canelones, un lugar mucho mejor”, concluyó Yamandú Orsi.