El policía vive cerca de un almacén del barrio Obelisco donde ingresaron delincuentes armados.
Ante los gritos desde ese comercio, el efectivo policial que estaba en su casa y fuera de servicio, decidió acudir en ayuda de sus vecinos, tomó su arma de reglamento, e intentó detener la rapiña, desatándose un tiroteo con más de 20 disparos.
Uno de los delincuentes, quizás quien quedó haciendo de campana, le sorprende y dispara de atrás y luego recibe otros disparos.
Con la urgencia del caso, el policía fue trasladado al Hospital Espínola de Las Piedras y desde allí al Hospital Policial, donde será intervenido ya que recibió dos disparos en el tórax y uno en la cabeza.
El almacén, ubicado en las calles Larrañaga y Magallanes del barrio El Obelisco.
Los delincuentes lograron huir, pero los investigadores presumen que uno de ellos está herido.