La Dirección de Acondicionamiento Urbano de la Intendencia de Canelones presentó al alcalde de Canelones, Darío Pimienta, y a los integrantes del concejo municipal el proyecto ejecutivo de remodelación de la Plaza 18 de de Julio.
Las obras –que se estima comiencen a fines de marzo– incluirán la instalación de una fuente seca, de un local gastronómico y de servicio de wifi libre.
El proyecto de remodelación de la Plaza 18 de Julio de la capital canaria se enmarca en el Programa de recalificación de centros de ciudad que lleva adelante la Dirección de Acondicionamiento Urbano de la Intendencia de Canelones.
La directora de Acondicionamiento Urbano, Arq. María Eugenia González, expresó que la modernización y recalificación de la Plaza 18 de Julio era una necesidad manifiesta para la Intendencia de Canelones, así como también una solicitud del Municipio y de los vecinos de Canelones. Detalló que se trabaja en un proyecto integral que implica una labor mancomunada junto a las direcciones generales de Obras, Gestión Ambiental y Tránsito y Transporte.
Con respecto a los plazos de obra, la directora expuso que se estima que los trabajos se extiendan entre siete y ocho meses. “Estamos pensando en comenzar a fines de marzo, principio de abril –ya están todos los procesos de compra y licitación empezados– y pensamos finalizar en los últimos meses del 2019”, manifestó. Además de las licitaciones para materiales e insumos para la obra, se estará licitando la construcción y concesión de un local gastronómico.
González informó que el monto estimado de la inversión es de 9 millones de pesos a lo que debe sumarse el valor de la mano de obra de las cuadrillas de funcionarios de la Intendencia, ya que el proyecto se ejecutará a través de modalidad mixta, con mano de obra propia de la Intendencia de Canelones y a través de contratos con empresas privadas.
El proyecto
El arquitecto Esteban Cedrés, responsable del proyecto, expuso que el objetivo es “revalorizar y recalificar este espacio”, a la vez de preservar algunas preexistencias como ser la configuración de medianas y diagonales que definen los canteros de la plaza. Las obras implicarán una renovación parcial de pavimentos, se recompondrá el monolítico existente y se complementará con zonas de pavimento de hormigón visto.
“Se incluirán nuevos equipamientos que responden a una necesidad y a los usos del espacio público contemporáneo. En lo inherente a bancos se usará un modelo similar al utilizado en el Prado y la iluminación se cambiará a tecnología LED, iluminación en las caminerías y nueva iluminación de piso”, explicó Cedrés.
El proyecto incluye, además, la incorporación de un local comercial destinado a la venta gastronómica. Se tratará de una construcción efímera ubicada en el área verde de la plaza (por detrás del monumento a La Bandera, sobre Batlle y Ordóñez), compuesto por un espacio interior de unos 35 m² y un deck (plataforma exterior).
Otro de los atractivos que se sumará a este espacio tras su remodelación será la incorporación de una fuente seca (sistema de chorros de agua) en la zona central de la plaza. Se trata de una fuente programable que permite brindar un show de agua, luz y música, aportando una parte lúdica en los meses de verano. “El concepto fuente seca responde a que todo el dispositivo de recolección y de retorno del agua se da por debajo del nivel de piso terminado, no llega a un estanque a la vista sino que se genera por debajo del pavimento. Esto permite que cuando la fuente no está encendida el espacio puede estar utilizado para otras actividades”, relató Cedrés.
Por su parte, la arquitecta Ana Vigo, también responsable del proyecto, manifestó que aprovechando este proyecto se intentará hacer un reordenamiento del entorno: estacionamientos, paradas, refugios peatonales, y se trabajará en la accesibilidad no solo de la plaza propiamente dicha sino también en todos sus cruces con vados adecuados al tipo de uso que se pretende.
Para finalizar, la arquitecta expuso que uno de los objetivos que persigue el proyecto es aumentar la afluencia de público que concurre a la plaza y lograr una apropiación del espacio por parte de personas de todas las edades. “Queremos que la Plaza 18 de Julio sea más vivida y disfrutada por todos los ciudadanos”, concluyó.