En el marco del taller de muralismo y educación que se lleva adelante a través del Programa Aprender Siempre (PAS), del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y del Proyecto PICCA del Gobierno de Canelones, un grupo de reclusos del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), unidad Nº 7, recibió un certificado de reconocimiento y agradecimiento por realizar tareas de voluntariado para la comunidad.

El objetivo de la propuesta era hacerles conocer sobre qué es la cultura comunitaria y también hacerlos partícipes de las actividades que se realizan afuera de la cárcel. El trabajo se llevó adelante entre el INR, MEC y el Gobierno de Canelones. Los participantes se sintieron muy motivados y útiles al realizar este trabajo en equipo.

Por su parte, Danisa Rodríguez, coordinadora del proyecto PICCA del Gobierno de Canelones, dijo que fue una actividad que los reclusos disfrutaron mucho. “Trajimos los juegos de la Unidad de Animación que estaban sin pintar para que los estudiantes de estos talleres pudieran hacer sus aportes y aplicaran sus saberes adquiridos a través del pintado de los juegos. Cuando se enteraron que con estas cosas se realizaban juegos para los niños en los barrios fue de gran alegría, el aporte y el interés de ellos fue espontáneo. Disfrutaron mucho de esta experiencia, de aportar a la comunidad y hoy estamos muy contentos de realizar este encuentro”, sostuvo Rodríguez.

El director de Cultura Sociocomunitaria, Alejandro Guarnieri, expresó que esta entrega de certificados es un agradecimiento hacia ellos. “Vinimos a levantar los materiales que hicieron los presos de la cárcel de Canelones. Nos apoyaron en la construcción de diferentes materiales recreativos para que lleguen a todos los chiquilines del departamento, en este caso fueron patines cooperativos y suecos”, explicó el director.

En otro orden, Fabián Meneses, recluso de la unidad, indicó que fue algo muy positivo para él y para sus compañeros. “Fueron muchas cosas positivas, de un pedacito de madera pudimos brindarle a algunos niños un poco de felicidad de este lado. Podemos colaborar con ellos y con su crianza, es una cosa muy buena, lo vemos de un lado positivo. Se formó un buen grupo y paso a paso fuimos logrando las cosas, nos manejamos con respeto”, expresó Meneses muy agradecido por la oportunidad.

Los reclusos se inscriben en los talleres a través de sus intereses, así como existen programas de educación formal, también existen programas de educación no formal, como es el caso de PICCA y PAS. La Unidad de Animación Sociocultural se encuentra fuertemente involucrada en la tarea y continuará su trabajo con ellos. Los reclusos también recibieron, por parte de la Intendencia de Canelones, una valija con libros para fomentar la lectura y el apredizaje.