Thursday, 28 March 2024
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Tras meses de investigación, la Policía de Canelones detuvo a un hombre que ayudó a esconder y trasladar el cuerpo de Eduardo Cardozo, homicidio que tuvo lugar a principios de julio.

La Policía de Canelones fue alertada de una persona fallecida en la desembocadura del arroyo Pando en la zona del Remanso de Neptunia. La víctima se encontraba dentro de una bolsa de nailon, envuelta en un calienta cama y atada a un colchón de dos plazas. El cuerpo tenía varios cortes en su cabeza, un orificio de bala en la espalda y dos impactos a la altura del hombro. Entre sus ropas se encontró un proyectil calibre 32.

Tras pericias fue identificado como Eduardo Cardozo de 43 años y poseedor de ocho antecedentes penales.

Unos días después fue ubicado su auto estacionado en el km. 26 de ruta Interbalnearia. Policía Científica realizó el relevamiento, logrando levantar y una tarjeta micro SD.

La Policía tomó declaración a testigos y a los familiares de la víctima que aportaron información sobre su entorno.

En la investigación desarrollada por el departamento de Homicidios de la Jefatura de Policía de Canelones también se analizaron las cámaras de videovigilancia policial y de seguridad de la zona, se identificó a un hombre que viajaba con la víctima en su auto antes del hecho y a una camioneta que circuló por la zona la noche del crimen.

A partir de ahí se realizó un trabajo de inteligencia para ubicar al requerido que fue detenido el 20 de agosto escondido en un monte en el paraje Nueva Carrara en Pan de Azúcar.

Al indagado de 47 años, sin antecedentes penales, se le dispuso la medida cautelar de prisión preventiva por un plazo de tres meses por la presunta comisión de un delito de homicidio en calidad de coautor.

Asimismo, se supo que otro hombre estaría vinculado al hecho. A raíz de esto se inspeccionó una casa ubicada en el City Golf de Atlántida donde se lo detuvo y se incautó un rifle calibre 22, un revólver calibre 38, una chumbera modificada calibre 22, un celular y una piña americana.

Respecto de las armas incautadas expresó que tanto el rifle como la chumbera modificada las tomó de la boca que tenía con su socio ahora formalizado. El revólver fue heredado de su padre, ahora fallecido.

El detenido de 53 años, sin antecedentes penales, fue condenado como autor penalmente responsable de un delito de encubrimiento en reiteración real, con un delito de tráfico interno, fabricación ilegal de armas de fuego, municiones explosivos y otros materiales relacionados, a la pena de veinticuatro meses de prisión los que se cumplirán en veintidós meses de prisión efectiva y dos en régimen de libertad a prueba.

Ministerio del Interior

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July 11, 2022

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