El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INAVI) y la agencia de cooperación internacional Interco – Nouvelle Aquitaine de Francia, firmaron el pasado lunes 14 un convenio para el impulso de una nueva reconversión vitícola que incluye el recambio de viñedos añosos y de escasa demanda comercial.

Además, la instalación de una viticultura sustentable y respetuosa de la biodiversidad, para atender los cambios en la evolución de la demanda internacional y el enoturismo.

El acuerdo abarca una serie de acciones de apoyo a la vitivinicultura nacional, que permitan la capacitación de los productores, la formación técnica del más alto nivel y el desarrollo del concepto de viticultura natural sustentable.

En esta primera etapa, realizarán un diagnóstico de las condiciones de producción, tanto a nivel vitícola, como a nivel industrial, a los efectos de elaborar un plan de trabajo específico, acorde a las condiciones detectadas.

El acuerdo prevé un plan de trabajo definido a 2022 y 2023, que implica la creación de un programa de actividades para los técnicos franceses que visiten Uruguay, así como facilitar la visita de viticultores y profesionales uruguayos a Burdeos, Francia y conocer de primera mano la realidad de uno de los principales productores del mundo.

La delegación francesa compuesta por la directora de Interco-Nouvelle Aquitaine, Christine Pecastaingts y los especialistas en viticultura Stephane Badet y Jean Phillipe Roby, junto al Dr. en Enología Ghillerme Martins, visitaron distintos establecimientos de producción de uvas y vinos, como también centros de enseñanza e investigación y compartirán sus conclusiones este viernes 18 de febrero, previo a su partida, en las instalaciones de INIA Las Brujas.

En la firma del acuerdo del lunes participaron el presidente de INAVI, Enól. Ricardo Cabrera, el embajador de Francia, Jean Paul Seytre y la directora de INTERCO-Nouvelle Aquitaine, Christine Pecastaingts, entre otras autoridades.

El presidente de INAVI dijo tras el acuerdo: "Esta es una ocasión muy particular para la vitivinicultura uruguaya, repetimos cosas que salieron muy bien en la década del 90 con el acuerdo con Interco, hoy con la presencia del embajador de Francia", y agradeció a los funcionarios y técnicos del Instituto, al Municipio de Las Piedras y el Gobierno de Canelones por la "consonancia permanente con la industria vitivinícola de cara a un departamento con el mayor volumen de producción".

Cabrera reconoció la histórica labor del grupo CREA como gran impulsor de este tipo de acuerdos con Francia ya desde la década del 70, "para propiciar luego la gran revolución vitícola del país. Hoy, gracias a lo que se ha hecho, estamos con los vinos de mayor calidad en la historia del Uruguay".

La directora Christine Pecastaingts, destacó que trabajar con INAVI ha sido siempre "fácil y fluido y esta vez no será la excepción. Tenemos hasta 2023 para hacer cosas juntos".

Destacó que en esta primera misión, el equipo técnico de INTERCO Nouvelle Aquitaine visitará distintos establecimientos para recoger información de primera mano y responder a todos los requerimientos de los productores uruguayos.

Señaló la importancia de que los vinos uruguayos tengan presencia en Francia e invitó a INAVI a contar con un pabellón de Uruguay en la feria internacional de Burdeos, Vinitech.

"Será una gran oportunidad para promocionar vuestros vinos, organizar degustaciones y hacer eventos con el enfoque de su país", expresó la directora de INTERCO.

Al hacer uso de la palabra, el embajador de Francia en Uruguay Jean-Paula Seytre hizo foco en la histórica vinculación entre Uruguay y Francia.

"Nuestros países tienen mucho en común en términos de cultura y de historia, pero si tuviera que elegir un tema que ilustra la fuerza de este vínculo, el vino sería probablemente el primero en el que pensaría".

Subrayó la historia compartida en torno a la variedad Tannat, originaria de Francia y cepa insignia de Uruguay, "lo que demuestra que los vínculos continúan, más de 150 años después".

Seytre informó que Francia, en el marco de su presidencia de la Unión Europea, tiene como prioridad definir un nuevo modelo de crecimiento que acompañe la transición ecológica y el intercambio de conocimiento sobre adaptación al cambio climático.

"En este sentido, el acuerdo para el desarrollo de una viticultura sostenible y respetuosa de la diversidad entre Uruguay y Francia, encaja perfectamente con esta visión que deseamos crear", finalizó.