Moscú, Rusia | AFP | por Oscar Laski

Lionel Messi y sus muchachos se subieron a las corridas al último tren en San Petersburgo y van directos a los octavos del Mundial de Rusia-2018 para verse las caras con Francia.

Argentina jugará con la subcampeona de Europa en Kazán el 30 de junio, y un día después se medirán Dinamarca y Croacia en Nizhni Novgorod.

Los primeros cruces en octavos, ya determinados el lunes, son Rusia-España y Uruguay-Portugal.

Primero hay que saber sufrir...

La estrofa del tango parece hecha a medida para la selección de Messi.

Una albiceleste sufrida dejó con el corazón en la boca a 44 millones de argentinos que veían cómo al crack y sus muchachos se les escapaba la meta de reivindicarse de tres finales consecutivas perdidas.

Quién si no él abrió el marcador con una corrida de las típicas del Barcelona al minuto 14 y eso tranquilizó a una selección que venía golpeada por múltiples versiones de una fractura interna.

Un ingenuo penal de Javier Mascherano que transformó en gol Victor Moses al minuto 51 le abrió las puertas a los africanos para hacerse su lugar en octavos, pero a falta de cuatro minutos para el final el defensa Marcos Rojo, el menos pensado, enganchó un balón y desató la locura albiceleste en el estadio de San Petersburgo.

La clasificación exculpa por unas horas de los errores, pero Argentina deberá mejorar mucho si la generación Messi quiere desquitarse de las tres caídas sucesivas en finales, en Brasil-2014 y en las ediciones 2015 y 2016 de la Copa América.

Salvo Messi, claro, ninguno de sus escuderos estuvo a la altura con un Gonzalo Higuaín al que le rebotaban todos los balones, un Angel Di María que no acertó un solo pase y Javier Mascherano autor del penal.

Pero Argentina recibió la mano indispensable que necesitaba para pasar a la siguiente ronda ya que Croacia venció a 2-1 a Islandia en el otro partido del Grupo D, además de su propio triunfo, que también era obligatorio.

"Le agradezco a toda la gente que está acá, por todo su sacrificio, y a todos los que están en Argentina que estuvieron siempre con nosotros. La camiseta de la Selección está por sobre de todo", dijo un Messi eufórico al concluir el partido.

En Buenos Aires explotó la algarabía después de una hora y media de tensión.

"Nunca jamás había perdido la esperanza. Ahora estamos en octavos (para jugar contra Francia)", dijo Julio Turumayo, un mesero de 38 años que estaba en la céntrica Plaza San Martín con su hijo y su esposa.

"Pero va a ser difícil. El gol de Messi fue fabuloso y dejó mudos a los que lo criticaban. El gol de Rojo fue una bendición", dijo Turumayo.

La Albiceleste ostenta un palmarés perfecto ante Nigeria en Mundiales, con cinco triunfos, incluido el de este martes, siempre en fase de grupos.

El conjunto sudamericano le había ganado 2-1 en Estados Unidos-1994, 1-0 en Corea del Sur y Japón-2002, igual resultado en Sudáfrica-2010 y 3-2 en Brasil-2014.

Argentina necesitó una mano de Nigeria, que derrotó a Islandia en la segunda fecha, y en el tercer y último también la ayuda de Croacia.

Demasiadas manos para una selección incluida en el pelotón de las favoritas.

Francia espera por Messi

El equipo de Didier Deschamps terminó como primero del Grupo C al igualar 0-0 con Dinamarca, que a su vez selló este martes la clasificación como segunda, en uno de los partidos más aburridos hasta ahora en el Mundial.

Pese a su gran poder ofensivo, Francia creó muy pocas opciones y careció de profundidad para perforar la férrea defensa danesa.

Con el boleto a octavos en el bolsillo, Francia dejó una imagen borrosa de cara a la siguiente instancia.

Deberá poner a trabajar más duro a sus delanteros Antoine Griezmann, Kylian Mbappé y Ousmane Dembélé si pretende llegar el 15 de julio al estadio Luzhniki de Moscú.

Estar era el objetivo

Unos 45.000 peruanos, entre los seguidores más numerosos de una selección, llegaron a Rusia para alentar a su selección, que disputaba un Mundial después de 36 años.

Para los peruanos, un pueblo apasionado por el fútbol, el objetivo se había cumplido: ir a un Mundial después de ocho ediciones ausentes.

Pero se llevan a Lima el premio consuelo de un triunfo que selló su ídolo y capitán Paolo Guerrero ante Australia.

"Con el tiempo nos dará beneficios, Perú tiene un potencial enorme, con buenos jóvenes y ellos han vivido lo que es un Mundial. Creo que Perú, si recibe el apoyo que merece, tiene mucho futuro", dijo el entrenador de Perú, el argentino Ricardo Gareca.