Uruguay le dijo "¡Gracias!" el lunes a los futbolistas de su selección juvenil, que trajeron a casa la primera Copa del Mundo Sub-20 del país, y la exhibieron en una caravana triunfal por la capital uruguaya.

Decenas de miles salieron a las calles de Montevideo este lunes a agradecer a los "pibes" de la Sub-20, que conquistaron un título esquivo para Uruguay, a pesar de haber ganado dos Copas del Mundo, en 1930 y 1950, los torneos olímpicos de fútbol de 1924 y 1928, y 15 veces la Copa América.

Los dirigidos por el DT Marcelo Broli se coronaron campeones el domingo en Argentina, al vencer 1-0 a Italia con un gol de Luciano Rodríguez, en un estadio repleto de uruguayos que habían cruzado el Río de la Plata para alentarlos.

"Dale campeón, dale campéon", coreaban los hinchas a medida que el bus descapotable avanzaba hasta el mítico Estadio Centenario.

María José Ospitaletche, una maestra de 59 años, directora de un colegio, lo vio pasar por la avenida costanera, junto a unos 170 escolares autorizados por sus padres para estar "en este momento histórico".

"Es importante estar acá para apoyar al deporte nacional. Esto es inolvidable para ellos", dijo a la AFP.

"Creí que nunca me iba a pasar que Uruguay ganara un Mundial. Casi me pongo a llorar cuando nos saludaron", señaló Enzo Ferrari, de 11 años, feliz de que el delantero Andrés Ferrari tenga su mismo apellido.

"¡Nunca había visto a ningún jugador tan cerca", apuntó, emocionada, Luisa Velasco, también de 11 años.

Luis Suárez, el goleador histórico de Uruguay y actual jugador de Gremio de Brasil, viajó a Montevideo para sumarse unos minutos a la caravana y festejar junto a los "gurises" de la Sub-20.

"Es un hincha más", dijo la Selección Uruguaya en Twitter, junto a dos fotos con los chicos.

"Al final se nos dio"

"Vamo'/Vamo' arriba la Celeste", "el himno a la selección uruguaya" del popular músico Jaime Roos, sonaba en muchos lados en Montevideo.

"Dormí una hora, pero esto es una alegría...", declaró al salir del aeropuerto el volante Alan Matturro, llevando el Balón de Plata que le entregó el torneo. Sobre él, la FIFA tuiteó este lunes: "¡Nació un nuevo cacique!".

En el bus, muchos jugadores dijeron a la TV que se les había "erizado la piel".

"No puedo creer toda esta gente, me llena de orgullo ser urugayo", dijo Anderson Duarte, una de las figuras del plantel.

Dos jugadores se emocionaron especialmente.

Uno de ellos fue Rodrigo Chagas, cuyo padre, un barrendero municipal, pudo viajar a Argentina a ver la final gracias a una colecta organizada en Artigas, la ciudad al norte del país de donde es oriundo. "Mi viejo es todo para mí", afirmó.

El otro fue Santiago Homenchenko, que tiene a su madre luchando contra un cáncer. "No la pude tener en los partidos por la maldita enfermedad. Pero ya la voy a abrazar", dijo.

Desde un noveno piso sobre la céntrica Plaza Independencia, trabajadores de una agencia de carga vieron pasar el bus entre banderas, bocinazos y cánticos.

"Es la primera vez que vemos a Uruguay campeón a nivel mundial", celebró Fabián Vidal, de 55 años.

Empleados bancarios de la Ciudad Vieja festejaron el triunfo. "Perdimos dos finales de Mundial Sub-20, la última en 2013 con Francia por penales. Al final se nos dio", dijo Marcos Rodríguez, de 42 años. "¡Ojalá se nos dé ahora para los mayores!".

Siete de los consagrados de la selección juvenil (aunque uno de ellos, Mateo Ponte se ha lesionado) ya fueron convocados por el nuevo DT de la selección mayor, Marcelo Bielsa, para los próximos amistosos de Uruguay contra Nicaragua, el miércoles próximo, y Cuba, el 20 de junio, ambos en el Centenario.

La pasión futbolera uruguaya no tiene límites.

Antes del homenaje previsto para los "chiquilines" de la Sub-20 el miércoles en el Centenario, la AUFTV estrenará el primer capítulo de la serie "Uruguay, tierra de fútbol", protagonizada por los jugadores de la selección mayor Federico Valverde, Sebastián Coates, Facundo Torres y Manuel Ugarte.

Montevideo, Uruguay | AFP | por Alina Dieste