El estado de alerta se originó en una denuncia sobre un supuesto individuo armado y encerrado en un ómnibus.
Próximo a las 8 de la mañana del 9 de julio, el sistema de emergencias 9.1.1 recibió una llamada de un chófer de ómnibus alertando que dentro de su vehículo ubicado en Goes y Acevedo Díaz se encontraba un hombre armado al cual había encerrado, por lo que se enviaron móviles policiales al lugar.
Trabajó allí un negociador de la Guardia Republicana junto a un grupo GEO y efectivos de la Zona I.
Luego de transcurrido un tiempo lograron inspeccionar el ómnibus en su totalidad, no ubicando a ninguna persona dentro.
El chófer del ómnibus fue derivado a declarar a la base de investigaciones de zona I.
El área fue liberada y pasó a funcionar normalmente.