Montevideo, Uruguay | AFP |
Tres de los pasajeros australianos del crucero Greg Mortimer que fueron internados en Uruguay por síntomas de coronavirus abordaron el vuelo humanitario que partió el sábado rumbo a Melbourne, junto a un centenar de evacuados del buque, informó la cancillería uruguaya a la AFP.
Se trata del matrimonio que bajó del barco el miércoles con neumonía y de otro ciudadano australiano que había sido internado la semana anterior.
Los tres se encontraban en condiciones de salud que les permitieron abordar el avión alquilado por la naviera australiana Aurora Expeditions, propietaria del crucero que está fondeado a 20 km del puerto de Montevideo desde el 27 de marzo.
Los otros cinco pasajeros y tripulantes que fueron hospitalizados en Montevideo por síntomas graves de covid-19 están "estables", según la cancillería: dos australianos están en cuidados intensivos, una británica permanece en sala con respirador y un filipino en cuidados intermedios. El último de ese grupo, un ciudadano filipino, será dado de alta y volverá al barco para hacer la cuarentena.
De las más de 200 personas que trasladaba el crucero, 128 dieron positivo en test de coronavirus, según la naviera.
Un Airbus A340, con personal médico a bordo y especialmente equipado para realizar la evacuación, llegó al aeropuerto internacional de Carrasco el sábado y partió ese mismo día con 112 pasajeros australianos y neozelandeses.
El vuelo humanitario se hizo "bajo estrictas medidas sanitarias", informó el gobierno uruguayo, que consideraba que todas las personas que viajan en el Greg Mortimer están contaminadas o contagiadas con covid-19.
El barco atracó en el puerto capitalino y tres horas después comenzó el desembarco de los pasajeros, que fueron trasladados en buses al aeropuerto con una fuerte escolta policial.
Una vez en la terminal aérea, subieron directo al avión, sin pasar por las ventanillas de migraciones ni manipular equipaje.
"El contacto humano va a ser prácticamente nulo", había anunciado Talvi.
El avión se organizó por zonas de riesgo, "con los pasajeros sentados según los resultados de las pruebas y el nivel de atención requerido", había asegurado Aurora Expeditions el viernes en un comunicado.
Una vez realizada la evacuación, quedaron todavía en el buque más de 80 miembros de la tripulación y una veintena de pasajeros estadounidenses y europeos.
La naviera informó que está trabajando en opciones de vuelos chárter para poder devolver a todos a sus hogares.