En noviembre pasado un hombre de 88 años quiso pagar una cuenta y se encontró con que no contaba con saldo suficiente en su tarjeta, por lo que consultó con su entidad bancaria. Allí le informaron que le habían extraído diferentes montos de su cuenta, movimientos que habrían comenzado en setiembre.
A raíz de esto la víctima realizó la denuncia y presentó como prueba su estado de cuenta, donde figuraban retiros, compras en distintos lugares y dos préstamos por un monto aproximado de 166.000 pesos uruguayos.
Ante esto acotó que la única persona que tenía acceso a su tarjeta de débito y su PIN era su cuidadora, contratada por la hija de la víctima que reside en Buenos Aires, quien era la encargada de pagar sus cuentas, la empresa de acompañantes y la medicación.
A su vez manifestó que constató el faltante de 23.000 dólares, una máquina de afeitar eléctrica y un aparato de presión, y que a su domicilio solo concurría la implicada y, en algunas oportunidades, el sobrino de ésta a visitarla.
Tras iniciarse la investigación pertinente, el pasado jueves 21 personal de Investigaciones concurrió a una vivienda del barrio Lomas de Solymar (Canelones) y allí detuvo a la indagada.
Puesta a disposición de la Justicia se condenó a M.S.V.P. de 47 años “como autora penalmente responsable de un delito continuado de apropiación indebida a la pena de ocho meses de prisión, (…) la que será cumplida bajo el régimen de libertad a prueba”.
Fuente: Ministerio del Interior