El Gobierno inauguró este lunes 12 un viaducto de 1.800 metros, con dos rampas de acceso principales y un puente en arco de 160 metros de largo, sumado a obras anexas en la zona de ingreso al puerto de Montevideo, lo que permitirá mejorar la circulación.

El proyecto, que implicó una inversión de 156.000.000 de dólares, separará el cruce vehicular, en la rambla portuaria, con la vía del Ferrocarril Central. "Habrá un antes y un después en el acceso oeste a la ciudad de Montevideo y al puerto, porque esta obra brinda varias soluciones", explicó el ministro de Transporte y Obras Públicas, José Luis Falero, a Comunicación Presidencial.

El nuevo viaducto, en la rambla Sud América, permite agilizar la movilidad, ya que en ese tramo de 1.800 metros no habrá cruces. También eliminó las interferencias en la circulación de los camiones que ingresen al puerto, para lo cual se mantendrá un acceso único en la zona norte y se ampliará el área portuaria.

El proyecto incluyó la construcción de tres carriles en cada sentido, con el objetivo de disminuir los tiempos de traslado y aumentar la capacidad de circulación en este punto, así como la iluminación de todo el tramo. Ahora, los vehículos livianos cruzan por el viaducto y los camiones ingresan al puerto sin dificultad por debajo, al igual que el ramal ferroviario viejo.

La inversión final del Estado uruguayo alcanzó los 156.000.000 de dólares. La financiación del proyecto estuvo a cargo de la Administración Nacional de Puertos y el banco de desarrollo subregional Fonplata.

Falero insistió en la importancia de esta mejora, por tratarse del ingreso oeste a la ciudad, uno de los trabajos más grandes en Montevideo desde hace muchos años. Lo definió como un proyecto de arquitectura e ingeniería "espectacular" y "muy necesario".

La obra comenzó en junio de 2019, y la actual administración avaló su continuidad e, incluso, decidió ampliarla, con la incorporación de reformas dentro del puerto, para modernizarlo y consolidarlo como centro de operaciones logísticas en la región. Esto comprende mejores condiciones en el tránsito interno, con una explanada para el ingreso norte, que permite que los camiones no queden en la calle.

En este sentido, añadió que se seguirá trabajando en los sistemas de control unificados, para reducir tiempos de espera de los camiones entre balanza, pesaje y permisos de Ganadería y Aduanas.

El ministro consideró que las obras recientemente finalizadas son parte de una segunda etapa, que comenzó con el intercambiador de la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM), en la ruta 5, que mejoró el ingreso al mercado.