El presidente de la República ha expresado su preocupación y tristeza por las acusaciones de delitos sexuales contra el exsenador nacionalista Gustavo Penadés.

Ha calificado la situación como seria y grave y ha afirmado que si Penadés es declarado culpable, se convertirá en un desconocido para él.

El mandatario destacó la importancia de que se haga justicia en este caso, especialmente porque se trata de una vulneración de menores, lo que agrava aún más la gravedad de los delitos. Lacalle Pou también mencionó que no ha tenido contacto con Penadés recientemente, pero sí ha estado en comunicación con su hermana.

En respuesta a las críticas sobre su amistad anterior con Penadés, el presidente señaló que en ese momento no había pruebas ni testimonios que respaldaran las acusaciones, por lo que no era apropiado mentir al respecto. Sin embargo, Lacalle Pou dejó claro que la situación ha cambiado drásticamente desde entonces.

En referencia a las supuestas implicaciones de funcionarios del Ministerio del Interior en una investigación paralela realizada por Penadés, Lacalle Pou aseguró que por este tema está en estrecho contacto con el ministro Luis Alberto Heber. Resaltó que la investigación fue llevada a cabo por la Policía, que aportó pruebas, sin encubrimientos ni falta de acción.

En cuanto al pedido de renuncia al ministro Heber por parte del Frente Amplio, el presidente afirmó que no le sorprende y considera que, en una situación tan trágica como esta, la renuncia de un ministro no aporta mucho.