En un evento crucial a escasos días del balotaje, los candidatos Álvaro Delgado y Yamandú Orsi protagonizaron un debate que abordó temas vitales para el futuro de Uruguay. Este encuentro se pudo seguir en vivo a través de diversas plataformas, generando interés en la ciudadanía.

Durante su intervención final, Yamandú Orsi enfatizó la importancia de la decisión que los ciudadanos deberán tomar en una semana. Afirmó que se enfrentan a "dos propuestas". Una representa "promesas incumplidas" mientras que la otra se define por "compromisos".

Destacó que su visión implica "un cambio seguro que une al Uruguay y nos permite crecer para poder llegar a fin de mes", asegurando que este enfoque "cuida más a nuestra gente" y prioriza el acceso a medicamentos y la mejora de la atención médica.

Por su parte, Álvaro Delgado concluyó su alocución proponiendo un camino que promete "crecimiento económico con garantía y libertad", advirtiendo que la alternativa del Frente Amplio implica "incertidumbre, suba de impuestos, menos libertad y más riesgos". Subrayó su preparación y experiencia como líder, listo para dirigir el país en esta nueva etapa. "Quiero ofrecer la experiencia, estoy preparado, pronto para ser ese capitán del timón del barco del país", sentenció.

Cuando el debate se centró en el tema del empleo, Orsi reconoció la pérdida de algunos puestos laborales en el último mandato del Frente Amplio, aunque defendió la creación de 300.000 oportunidades de trabajo durante los 15 años de gobiernos frenteamplistas. Destacó la necesidad de crear empleo de "calidad" y mencionó iniciativas como la creación de 12.000 empleos anuales para jóvenes entre 18 y 24 años. También hizo un llamado a priorizar a las madres jefas de hogar y a mejorar las jubilaciones mínimas.

Delgado replicó que durante el último período de gobierno del Frente Amplio se destruyeron 50.000 empleos, mientras su administración logró disminuir la inflación y disminuir los impuestos. Señaló que la reforma en seguridad social es un proceso gradual, rechazando las afirmaciones de Orsi sobre un retroceso en jubilaciones.

Asimismo, la discusión se movió a la educación, donde Delgado defendió su "transformación educativa" como una mejora necesaria, mientras Orsi criticó que este proceso no ha abordado adecuadamente el ausentismo escolar y propuso un pacto educativo nacional para abordar estas preocupaciones de manera colectiva. Ambos candidatos presentaron sus visiones para mejorar la calidad educativa en el país.

En el ámbito económico, Orsi reivindicó los logros del Frente Amplio en materia de crecimiento y distribución justa del ingreso, asegurando que no aumentarán impuestos. Delgado, en contraposición, argumentó que la gestión anterior dejó un legado de desempleo y déficit, destacando la recuperación económica bajo su gobierno. También cuestionó Delgado que Orsi afirme que no aumentará impuestos, cuando en realidad, las bases programáticas del Frente Amplio "hablan de subir impuestos, de patrimonio y renta y al capital".

Finalmente, la seguridad se convirtió en un punto candente del debate. Delgado acusó al Frente Amplio de un fracaso en este tema, afirmando que su gobierno ha logrado reducir delitos significativos. También criticó Delgado que las bases programáticas del Frente Amplio incluyan mención a "desprisionalizar", "en la página 51", que implica "abrir las puertas de las cárceles"; esto "ya lo hicieron" y "los resultados no fueron buenos" dijo Delgado; asegurando como ciudadano que le da "mucho temor" que esto ocurra nuevamente.

Por su parte, Orsi respondió enfatizando la necesidad de un enfoque integral frente al narcotráfico y la violencia, resaltando la importancia de la rehabilitación en el sistema penitenciario y la inversión en seguridad. Ambos candidatos esbozaron sus propuestas para lidiar con estos desafíos apremiantes.

El debate dejó al descubierto las distintas visiones sobre el futuro del país que ambos contendientes proponen. La población deberá sopesar estas diferencias antes de tomar una decisión el próximo domingo.