Entre el 1° de noviembre de 2023 y el 30 de abril de 2024, hubo un total 1.554 intervenciones por parte de Bomberos y 14.237 hectáreas afectadas.
El Decreto N° 436/2007 prohíbe la realización de fuegos y quemas de cualquier tipo al aire libre en todo el territorio nacional, desde el 1° de noviembre hasta el 30 de abril de cada año.
En la pasada temporada durante la vigencia del mencionado Decreto, es decir entre el 1° de noviembre de 2024 y el 30 de abril de 2025, hubo un total 1.554 intervenciones por parte de Bomberos. 293 de ellas se debieron a incendios en monte, 1.230 a incendios de campo y 31 por incendios combinados.
Esto significó un total de 14.237 hectáreas quemadas, 864 por incendios en monte, 11.975 por incendios de campo y 1.398 por incendios combinados.
Los departamentos que presentaron mayor superficie afectada fueron Salto, Artigas y Canelones. Los departamentos donde los bomberos debieron intervenir en mayor cantidad de ocasiones fueron Canelones, Montevideo y San José con 505, 345 y 207 intervenciones, respectivamente.
Tablero con la información de la temporada de incendios 2024-2025 en formato gráfico
Según la Dirección Nacional de Bomberos todos los incendios que se desataron fueron controlados en menos de 24 horas.
De acuerdo al análisis del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), si bien se registraron eventos puntuales de exceso hídrico, la temporada mostró un patrón seco predominante en gran parte del país.
El período más seco fue entre la segunda quincena de diciembre 2024 y la primera quincena de febrero 2025. Los déficits de precipitación fueron mayores en las regiones norte y sur. El mes más crítico en cuanto a falta de precipitaciones fue enero. En contraste, febrero presentó acumulados pluviométricos por encima del promedio, con excedentes del 80-100%.
En relación a las temperaturas, diciembre fue el mes más fresco, con temperaturas ligeramente por debajo de lo normal. Febrero y marzo mostraron las mayores anomalías positivas. Las temperaturas más altas se registraron en la segunda mitad del período, haciendo que el semestre fuera más cálido de lo habitual.
Respecto a las acciones, vale recordar que se implementaron en el marco de la llamada MAIF: Mesa de Análisis de Incendios Forestales, un ámbito de articulación interinstitucional impulsado por la Dirección Nacional de Emergencias en el que participan los distintos actores que, en el marco del Sinae, trabajan en la gestión y reducción del riesgo de incendios forestales y de campo.
Aumento del número de inspecciones por parte de la Dirección General Forestal del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), actualización de los protocolos departamentales de respuesta, realización de capacitaciones y sensibilizaciones para diferentes destinatarios, organización de ejercicios de simulación y simulacro, diseño de campañas de bien público, participación en distintas redes internacionales y fortalecimiento de las capacidades de detección y combate tanto a nivel del Estado como de socios privados como la Sociedad de Productores Forestales (SPF); fueron algunas de las acciones que se llevaron adelante, buscando por un lado prevenir la ocurrencia de incendios forestales y de campo y por otro, en caso de ocurrencia, asegurar una respuesta coordinada, efectiva e integral.
Estos resultados se presentaron el pasado 9 de mayo en conferencia de prensa. En esa instancia estuvieron presentes el Director Nacional de Emergencias, Leandro Palomeque; el director general forestal, Gastón Martínez; el subdirector nacional de bomberos, José Ribeiro; la presidenta del Instituto Uruguayo de Meteorología, Madeleine Renom y la presidenta de la Sociedad de Productores Forestales, Lucía Basso.
Palomeque destacó el trabajo coordinador en la gestión de riesgos en general y en el caso de los incendios forestales en particular y fue categórico al afirmar: "El tratamiento de incendios no es resorte de un solo organismo, es responsabilidad país. Y la interinstitucionalidad es la que nos lleva a garantizar la respuesta".