La esquizofrenia es un trastorno mental grave que a escala mundial afecta a aproximadamente 24 millones de personas, es decir, a 1 de cada 300 personas.
Es habitual que las personas que padecen esquizofrenia sean víctimas de estigma, discriminación y violación de sus derechos humanos. A escala mundial, más de dos de cada tres personas que padecen psicosis no reciben atención de salud mental especializada. Se dispone de una variedad de opciones de atención eficaces para tratar a las personas que padecen esquizofrenia, y al menos una de cada tres de ellas podrá recuperarse por completo. Síntomas
La esquizofrenia se caracteriza por una importante deficiencia en la forma en que se percibe la realidad y por cambios de comportamiento como los siguientes:
Al menos un tercio de las personas que padecen esquizofrenia experimentan una remisión completa de los síntomas (1). Algunas personas que padecen esquizofrenia experimentan recurrentemente un empeoramiento y una remisión de los síntomas a lo largo de la vida, otras, un empeoramiento gradual de los síntomas con el paso del tiempo.
Magnitud e impacto
A escala mundial, la esquizofrenia afecta a aproximadamente 24 millones de personas, es decir, a 1 de cada 300 personas (0,32%). En los adultos, la tasa es de 1 de cada 222 personas (0,45%) (2). No es tan común como muchos otros trastornos mentales. Lo más frecuente es que aparezca al final de la adolescencia o entre los 20 y los 30 años de edad, y en los hombres suele manifestarse antes que entre las mujeres.
La esquizofrenia se asocia frecuentemente con una fuerte ansiedad y un importante deterioro de las esferas personales, familiares, sociales, educativas, ocupacionales y otras importantes esferas de la vida.
Las personas que padecen esquizofrenia tienen una probabilidad de 2 a 3 veces mayor de morir prematuramente que la población general (3), a menudo por causa de enfermedades físicas tales como enfermedades cardiovasculares, metabólicas o infecciosas.
Las personas que padecen esquizofrenia a menudo ven violados sus derechos humanos, tanto dentro de las instituciones de salud mental como en entornos comunitarios. El estigma contra las personas con esta afección es intenso y generalizado, es causa de exclusión social y afecta a sus relaciones con los demás, en particular sus familiares y amigos. Ello contribuye a la discriminación, que a su vez puede limitar el acceso a la atención médica general, la educación, la vivienda y el empleo.
Durante las emergencias humanitarias y de salud pública pueden producirse tensiones y temores extremos, pueden quebrantarse los apoyos sociales, se puede producir aislamiento y se pueden interrumpir los servicios de atención de la salud y el suministro de medicamentos. Estos cambios pueden afectar a la vida de las personas que padecen esquizofrenia, y exacerbar los síntomas ya presentes. Durante las emergencias, las personas que padecen esquizofrenia son más vulnerables que las demás a diversas violaciones de los derechos humanos, como la desatención, el abandono, la falta de vivienda, el abuso y la exclusión.
Causas de la esquizofrenia
En las investigaciones no se ha distinguido una causa única de la esquizofrenia. Se considera que la esquizofrenia puede estar provocada por la interacción entre la dotación genética y una serie de factores ambientales. Los factores psicosociales también pueden afectar al desencadenamiento y el curso de la esquizofrenia. El consumo excesivo de cannabis se asocia con un riesgo elevado de padecer el trastorno.
Servicios
Actualmente, a escala mundial, la inmensa mayoría de las personas que padecen esquizofrenia no reciben atención de salud mental. A un 50% aproximadamente de las personas ingresadas en los hospitales psiquiátricos se les ha disgnosticado esquizofrenia (4). Solo el 31,3% de las personas que padecen psicosis reciben atención de salud mental especializada (5). La mayoría de los recursos destinados a los servicios de salud mental se gastan de manera ineficiente en la atención proporcionada en los hospitales psiquiátricos.
Hay pruebas evidentes de que los hospitales psiquiátricos no son eficaces a la hora de proporcionar la atención que necesitan las personas que padecen afecciones de salud mental, y de que en ellos se violan de forma recurrente los derechos humanos básicos de las personas que padecen esquizofrenia. Hay que ampliar y acelerar los esfuerzos por transferir la atención desde las instituciones de salud mental hacia la comunidad. Esos esfuerzos comienzan con el desarrollo de una gama de servicios de salud mental de calidad basados en la comunidad. Las opciones en materia de atención de salud mental basada en la comunidad incluyen la integración en la atención primaria de salud y la atención hospitalaria general, los centros comunitarios de salud mental, los centros de día, las viviendas con servicios de apoyo y los servicios periféricos para el apoyo en el hogar. Es importante que en la prestación de apoyo participe la persona que padece esquizofrenia, los miembros de la familia y la comunidad en general.
Manejo y apoyo
Existe una variedad de opciones de atención eficaces para las personas que padecen esquizofrenia, en concreto medicamentos, psicoeducación, intervenciones familiares, terapia cognitivo-conductual y rehabilitación psicosocial (por ejemplo, capacitación en aptitudes para la vida). Los centros de atención médica prolongada, las viviendas con servicios de apoyo y el empleo asistido son opciones de atención esenciales de las que deben disponer las personas que padecen esquizofrenia. Un enfoque orientado a la recuperación, que ofrezca a las personas la posibilidad de intervenir en las decisiones de tratamiento, es esencial para las personas que padecen esquizofrenia y para sus familias y cuidadores.
Fuente: OMS
Referencias
1) Harrison G, Hopper K, Craig T, Laska E, Siegel C, Wanderling J. Recovery from psychotic illness: a 15- and 25-year international follow-up study. Br J Psychiatry 2001;178:506-17.
2) Institute of health Metrics and Evaluation (IHME). Global Health Data Exchange (GHDx). http://ghdx.healthdata.org/gbd-results-tool?params=gbd-api-2019-permalink/27a7644e8ad28e739382d31e77589dd7 (consultado el 25 de septiembre de 2021)
3) Laursen TM, Nordentoft M, Mortensen PB. Excess early mortality in schizophrenia. Annual Review of Clinical Psychology, 2014;10, 425-438.
4) OMS. Mental health systems in selected low- and middle-income countries: a WHO-AIMS cross-national analysis. OMS: Ginebra, 2009.
5) Jaeschke K et al. Global estimates of service coverage for severe mental disorders: findings from the WHO Mental Health Atlas 2017 Glob Ment Health 2021;8:e27.